Los gobiernos emanados del Grupo Morena, llegaron a ocupar las oficinas con la idea de que su única responsabilidad es repartir dádivas a los pobres. Entregarles despensas para que sobrevivan a una pobreza que va en aumento.
Han heredado las ideas del presidente de México que prefiere entregar en propia mano la ayuda, prescindiendo de las instituciones de conformación mixta (ciudadanos y funcionarios). Solo así se explica que la ahora llamada Secretaría de Integración y Bienestar, no haga nada, absolutamente para corregir el tremendo error/atropello cometido en el gobierno de Bonilla.
De esa Secretaría, cuya momentánea titular fue Laura Torres Ramírez, partió la decisión de desconocer al X Consejo Estatal que se integra por la Ley de Fomento a las Actividades de Bienestar y Desarrollo Social. Presentando ante el Tribunal Estatal de Justicia Administrativa de B. C. Primera Sala, el 23 de enero del 2020 según expediente 28/2020 una queja de que las elecciones para nombrar a los consejeros no había sido correcta.
Claro que el silencio y la aceptación de los consejeros (hombres y mujeres) contribuyó a que se cometiera este atropello. Pero el mayor responsable fue Luis Millán que por su aspiración a presidir el Consejo, no demostró capacidad para unir a todos y defender ese atropello de la SIBSO y por supuesto del Tribunal Estatal que no revisó adecuadamente los documentos que le presentaron para apoyar esa promoción.
Una Ley que fue en su momento muy bien recibida a nivel nacional por su contenido de avanzada. Que en la fecha de su publicación en el Periódico Oficial del 2 de marzo del 200l fue un claro ejemplo de lo que ahora se conoce como Gobernanza por la unión de gobierno y ciudadanía para beneficio de la ciudadanía. Ahora está casi eliminada, por el desinterés o ignorancia de la autoridad estatal.
A partir del 2015, respondiendo a una Convocatoria para que en el estado y en Tijuana, que es el único municipio que cuenta con su propio Consejo Municipal de OSC (COMOSC) se contó con la Promesa Altruista, que la recordamos a continuación. Con la esperanza de que se vuelvan a comprometer quienes tengan esa responsabilidad:
PROMESA ALTRUISTA
Por mi honor prometo:
Actuar, buscando de la manera más honrada,
Generosa e imparcial, que me sea posible,
La realización del BIEN COMÚN.
Para que mi Patria y mis hermanos más necesitados
Logren superar el subdesarrollo y la injusticia.
Que con mi acción solidaria, pueda evitarles
(Autoridad que toma la protesta)
SI ASÍ LO HACEN QUE LA SOCIEDAD DE LOS RECONOZCA Y PREMIE.
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