En la actualidad, se le conoce como La Ciudad más visitada del Mundo. Aunque su frontera con Estados Unidos de Norteamérica propició otros adjetivos, que no vale la pena mencionar, por ser tan conocidos y pertenecer a otra época.
En este 16 de julio Tijuana, está celebrando sus 138 años de fundación virtual y desde hace algunos años el Congreso de la Unión declaró a Tijuana, Ciudad Heroica por la indomable batalla que sus habitantes libraron los días 8 y 9 de mayo de 1911 para defenderla como parte de la soberanía mexicana. El asunto no es menor, sino el resultado del amor a la patria de un puñado de habitantes que arriesgaron su vida (muchos la perdieron) para que Tijuana siguiera siendo tierra mexicana.
Historia mínima de una gran acción.
En 1911 Tijuana tenía una población aproximada de 700 personas y el 8 de mayo llegaron poco más de 300 filibusteros y algunos miembros del Partido Liberal Mexicano, de los Hermanos Enrique y Ricardo Flores Magón, todos armados y abastecidos en abundancia para librar una batalla y lograr sus propósitos de quedarse con la ciudad. El sub prefecto José Ma. Larroque con su “ejercito” de 9 policías, además del joven sub teniente Miguel Guerrero al mando de 25 soldados de la compañía fija y un grupo de voluntarios, aunque sin parque suficiente, organizaron la defensa.
El 9 de mayo se libró la batalla más sangrienta hasta que se oyó una voz que informaba “¡se acabó el parque!” así que los defensores tuvieron que tomar camino para Ensenada y presentarse ante el comandante político y militar, coronel Celso Vega. Le solicitaron refuerzos para regresar a seguir combatiendo. Ese día 9 de mayo, murieron por la Patria José Ma. Larroque, Juan Osuna, Clemente Angulo, Pastor Ramos, Miguel Mendoza, Francisco Cuevas, Alfonso Padilla y un voluntario anónimo.
Concluido el combate, las fuerzas filibusteras, izaron la bandera de las barras y las estrellas. Transcurrieron 44 días de ocupación. Durante ese tiempo los filibusteros realizaron actos de vandalismo, saqueo de negocios, quemaron la plaza de toros y otros edificios. Destrozaron las oficinas públicas y cometieron muchas tropelías más, permitiendo la explotación del vicio.
Hasta que el 22 de junio, llegó de Ensenada el coronel Celso Vega, con un pequeño ejército, reforzado por voluntarios, nativos, residentes mexicanos de San Diego y Los Ángeles, así como elementos del 8º Batallón procedente de Sinaloa. Por las lomas de Agua Caliente se entabló un definitivo combate contra los invasores y pudieron arrojarlos del suelo nacional. Ese día 22 de junio la bandera tricolor volvió a izarse.
Por ese gran hecho, Tijuana fue declarada Heroica. Tijuana Heroica así debe ser escrito en todo documento oficial.
(*Con información tomada de Wikipedia)
Comentarios