Quienes por muchos años han estado fortaleciendo las actividades desde el sector del Voluntariado, saben que no les interesa pelear contra las autoridades. En los 30 años pasados difícilmente alguien recordará de un pleito que se haya iniciado de los Organismos de la Sociedad Civil (OSC´S)
Eso sí, saben responder a ofensas con respeto e información; continuar con el trabajo de servicio a pesar de las piedras que les arrojen algunos funcionarios. Unos de ellos más que otros supieron en su momento apoyar y fortalecer las actividades de los OSC´S.
Gracias a esas unión en el trabajo, fue posible que surgieran leyes importantes para la protección de las instituciones ciudadanas y el cabal cumplimiento de sus deberes. La Ley de Fomento a las Actividades de Bienestar y Desarrollo Social que mandata la creación del Consejo Estatal de OSC´S y su aportación a los programas de gobierno surgidos del Ejecutivo Estatal, principalmente es un gran ejemplo en toda la Nación.
Durante los sexenios del Lic. Eugenio Elorduy Walther y Lic. José Guadalupe Osuna Millán, que tuvieron la inteligencia de nombrar a magníficos Secretarios de Desarrollo Social hubo armonía y respeto (ver pág.9). Y también en esos dos sexenios fue posible trabajar muy de la mano con muchos de los legisladores locales, por eso, tras distintos foros y estudios, aprobaron las leyes relacionadas con el Desarrollo y Asistencia Social.
En la actualidad padecemos, salvo excepciones contadas, como titulares en las alcaldías y en las gubernaturas a partir del 2018, sin olvidar las indicaciones del Ejecutivo Nacional, de una grotesca actitud que ignora toda actividad del Tercer Sector. Por eso en este ejemplar de La Gaceta, ofrecemos algunas muestras del trabajo que desarrollan esos OSC´S y sus aportaciones a la comprensión pública de algunos problemas sociales como son el Autismo y la Discapacidad que sufren niños, niñas, adolescentes y adultos.
Son muchas las instituciones ciudadanas que se hacen presente con ayuda, guía y consejos de cómo atender, hacer frente y dar oportunidades a todas estas personas para que reciban la terapia necesaria y eficiente que los lleva a afrontar con capacidad esos problemas de salud.
Ojalá que las autoridades del estado y de los ayuntamientos, incluyendo los Fundacionales como San Felipe y San Quintín, tengan comprensión o por lo menos interés en conocer las actividades de estas instituciones ciudadanas. Por cierto, en San Quintín y buena cantidad de OSC´S que realizan extraordinarios trabajos.
Una cosa es segura: ni la indiferencia, incomprensión o inventos de malas conductas, les han hecho ni les harán que olviden sus objetivos y cierren sus instituciones. Aunque a la fecha, hay varias en el estado que “bajaron la cortina” ante las agresiones burocráticas.
Por lo pronto… ahí están para servir a los grupos vulnerables y a sus comunidades del Estado.
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