A la campaña de las autoridades, se unieron con entusiasmo elementos de Risaterapia de Mexicali (médicos de la risa) con los que atienden la salud física y que piden generosidad de las personas para donar sangre.
Antes de la Pandemia COVID resultaba difícil interesar a la ciudadanía para que donara sangre. A mediados del año 2022 sigue siendo una urgencia que acepten hacerlo, a pesar de que lo más difícil pasó y que la vacunación ha permitido una situación casi normal en las actividades sociales.
Pero, la falta de interés de los mexicanos para donar sangre obedece a que el gobierno no realiza campañas para crear conciencia sobre la importancia de este proceso, a fin de lograr que la donación sea voluntaria y así tener la oportunidad de salvar vidas.
En Estados Unidos sí hay donación porque realizan campañas y aquí en México no las hacen, aseguran las personas que atienden en el sector salud. Y razonan: cuando se tiene suficiente información hay más conciencia y corresponde a los gobiernos impulsar la donación de sangre. No deben seguir dejando solas a las instituciones privadas o de servicio como la Cruz Roja Mexicana en todas sus delegaciones estatales y municipales.
Dr. Ricardo de León Figueroa, director del Control de Transfusiones, con sus “colegas de la risa” en una gran campaña para que la gente se anime a salvar vidas, donando sangre.
Desgraciadamente en la república mexicana, la gente dona para ayudar a un familiar o a un amigo hasta que se presenta un problema de salud, y no de manera voluntaria para salvar más vidas.
Otra situación que se presenta es que acuden a donar varias personas, pero al efectuarles las pruebas, no son candidatas para donar porque tienen enfermedades que ellas no sabían
que padecían. En México no se tiene la cultura de la prevención, ni tampoco se acude a los médicos para revisiones regulares.
También la edad puede ser un impedimento para donar sangre, como ha pasado en tantas ocasiones, que pueden donar en varias ocasiones para ayudar a familiares y amigos. Y de pronto al llegar a los 65 años, ya no les permiten, por circunstancias de seguridad. Y en el lado opuesto, hay muchas personas que no se animan a donar por temor. Y ese miedo se origina por la ignorancia. Por eso se sugiere que las autoridades de salud, hagan intensas campañas informativas. Pero no lo hacen.
La ciudadanía de este país, en distintas épocas y situaciones de emergencia ha acudido con entusiasmo a colaborar. Pero en el caso de la salud, es distinto, tienen mucha razón al sentir miedo de donar, porque no ha habido campañas intensas que les informe los requisitos y también los motivos para impedir que personas mayores de 65 años, donen sangre.
La ciudadanía de este país, en distintas épocas y situaciones de emergencia ha acudido con entusiasmo a colaborar. Pero en el caso de la salud, es distinto, tienen mucha razón al sentir miedo de donar, porque no ha habido campañas intensas que les informe los requisitos y también los motivos para impedir que personas mayores de 65 años, donen sangre.
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